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    Fairbanks

    Fairbanks, puerta de entrada al corazón dorado de Alaska

    Fairbanks, puerta de entrada al corazón dorado de Alaska, te recibe con su belleza inigualable y auroras boreales de ensueño.

    27 de agosto, 2024

    Rodeada de una belleza salvaje, Fairbanks, puerta de entrada al corazón dorado de Alaska, se alza como la ciudad más grande del interior del estado y un destino cautivador para aquellos que buscan aventura, cultura y experiencias inolvidables.

    Desde contemplar la mágica aurora boreal danzando en el cielo nocturno hasta recorrer parques nacionales y reservas naturales donde la vida silvestre florece, la ciudad nos  trae miles de propuestas para conectar con la esencia pura de Alaska.

    Pero más allá de su entorno natural, también atesora una rica historia y cultura, marcada por la fiebre del oro y la herencia de los pueblos indígenas. Recorrer sus museos, sitios históricos y festivales anuales es viajar a través del tiempo, donde las tradiciones y leyendas cobran vida.

    Historia y cultura de Fairbanks

    Lejos de ser solo una ciudad rodeada de belleza natural, posee una rica historia y cultura que se entrelaza con la identidad de Alaska. Su pasado marcado por la fiebre del oro, la herencia de los pueblos indígenas y la influencia de diferentes culturas, la convierten en un destino fascinante para aquellos que desean interiorizarse en el alma de este territorio.

    Su historia se remonta a miles de años atrás, cuando pueblos indígenas como los Athabasca y los Tanana habitaban la región. Su legado se refleja en la toponimia local, las técnicas de supervivencia y la profunda conexión con la tierra que aún perdura en la actualidad.

    A finales del siglo XIX, la llegada de buscadores de oro durante la fiebre del oro de Klondike transformó Fairbanks para siempre. La ciudad se convirtió en un bullicioso centro comercial y de transporte, atrayendo a miles de personas de todo el mundo en busca de fortuna. El Museo del Norte y la Casa Morris son algunos de los lugares que permiten revivir este período histórico tan significativo.

    Cabe destacar también que la ciudad ha sabido conservar y celebrar su diversidad cultural, donde se mezclan influencias indígenas, europeas y americanas. Esta mezcla se refleja en su gastronomía, con platos típicos como el pescado blanco ahumado y el pan de Alaska, así como en su artesanía, donde destacan las piezas elaboradas con piel, madera y hueso.

    A lo largo del año, se llevan a cabo diversos eventos y festivales que celebran su cultura y tradiciones, como el Festival de Invierno, el Festival de la Luz del Norte y la Feria de la Minería.

    ¿Cómo es su clima?

    Fairbanks, puerta de entrada al corazón dorado de Alaska, cuenta con un clima continental subártico, caracterizado por inviernos fríos y largos, veranos templados y cortos, y cambios estacionales marcados. Esta singularidad climática define en gran medida el paisaje, las actividades y la forma de vida en la ciudad.

    El invierno en Fairbanks se presenta con temperaturas promedio entre -12 °C y -23 °C, con mínimas que pueden alcanzar los -40 °C. La nieve cubre la ciudad durante gran parte de la temporada, creando un paisaje invernal de ensueño.

    Sin embargo, el verdadero espectáculo del invierno en la región es la aurora boreal, también conocida como luces del norte. Este fenómeno natural, visible principalmente entre septiembre y abril, ilumina el cielo nocturno con una danza de colores que atrae a visitantes de todo el mundo.

    Con la llegada de la primavera, las temperaturas comienzan a subir gradualmente, alcanzando un promedio de entre 4 °C y 10 °C. La nieve se derrite, dando paso a un paisaje verde vibrante y a la floración de las flores silvestres.

    El verano es más bien corto pero intenso. Las temperaturas promedio oscilan entre 13 °C y 21 °C, con días largos y soleados. Un fenómeno único de esta época del año es el sol de medianoche, cuando el sol permanece visible en el cielo durante toda la noche.

    Por último, el otoño se caracteriza por sus colores, con las hojas de los árboles que se tornan de tonos amarillos, naranjas y rojos. Las temperaturas comienzan a descender, con un promedio de entre -1 °C y 7 °C.

    Debes saber también que, según la estación, puedes deleitarte junto a los tuyos con actividades al aire libre como kayak y senderismo, y hasta deportes de invierno como el esquí y el snowboard. Repasa también nuestro artículo sobre el top 10 deportes de invierno en Alaska.

    ¿Qué actividades hacer en Fairbanks? 

    Esta región cuenta con miles de actividades para todos los gustos y estilos de viaje. Desde aventuras al aire libre en medio de paisajes impresionantes hasta inmersiones en la cultura local y experiencias únicas bajo la aurora boreal, la ciudad despliega ante sus turistas un abanico de oportunidades amplísimo.

    Si te inclinas por las actividades al aire libre, dispones de caminos para realizar senderismo o ciclismo. 

    No dejes de contemplar el mágico espectáculo de luces de la aurora boreal danzando en el cielo nocturno, especialmente visible entre septiembre y abril, o de pasear en trineo tirado por perros.

    También puedes experimentar la pesca tradicional en Alaska, capturando peces bajo la capa de hielo de los lagos y ríos, o descendiendo por los rápidos ríos haciendo rafting o kayak.

    Visita museos y sitios históricos, como el Museo del Norte, la Casa Morris y el Cementerio de Fairbanks.

    Y saborea platos típicos como el pescado blanco ahumado, el pan de Alaska y el postre akutaq, conociendo además los pueblos indígenas de la región, Athabasca y Tanana.

    Alojamiento en Fairbanks

    La ciudad cuenta con diversos tipos de alojamiento para que escojas según tu presupuesto, preferencias y estilo de viaje que desees.

    Si pretendes quedarte en un hotel de lujo, las alternativas como Borealis Camp, Aurora Villa o Iniakuk Lake Wilderness Lodge combinan magistralmente sus instalaciones en armonía con la naturaleza de ese sitio.

    Los hostales como Billie’s Backpackers Hostel, Sven’s Basecamp Hostel o 9th Ave Hostel son una alternativa más económica e ideal para personas que viajen y desean socializar con otros huéspedes. 

    En cuanto a las cabañas, las encontrarás a las afueras de la ciudad. También sitios como Airbnb cuentan con muchísimos alojamientos para escoger y vacacionar como si estuvieses en tu propia casa.

    ¿Cómo es la gastronomía en Fairbanks?

    A diferencia de las ciudades costeras del estado, donde el marisco fresco es protagonista, la cocina de Fairbanks se caracteriza por ingredientes locales, platos abundantes y sabores tradicionales, con una fuerte influencia de los pueblos indígenas y de los pioneros que llegaron a la región durante la fiebre del oro.

    Puedes probar platos como el pescado blanco ahumado, el akutaq (postre tradicional de los pueblos indígenas de Alaska elaborado con grasa de foca, bayas silvestres, azúcar y nieve), moose stew (guiso de carne de alce con verduras y especias), sourdough pancakes (panqueques elaborados con masa madre) o berry jam (mermeladas caseras de bayas silvestres).

    Entre los restaurantes más recomendados para probar la gastronomía local, The Pump House Restaurant, Chena’s Alaskan Grill o Lavelle’s Bistro se encuentran entre los preferidos de los comensales locales y turistas, con excelentes críticas y variedad de platos para todos los gustos.

    ¿Cómo llegar a Fairbanks?

    La ciudad se encuentra a 800 kilómetros al norte de Anchorage, la más grande del estado. Aunque no hay carreteras directas que conecten ambas ciudades, existen diversas opciones para llegar, dependiendo de tu presupuesto, tiempo disponible y preferencias.

    La forma más rápida y sencilla de viajar a Fairbanks es en avión. El Aeropuerto Internacional de Fairbanks (FAI) cuenta con vuelos directos desde varias ciudades de Estados Unidos, como Seattle, Anchorage, Portland y Minneapolis.

    También hay vuelos con conexión desde otras ciudades de Estados Unidos y del resto del mundo. El tiempo de vuelo desde Seattle es de aproximadamente 3 horas, mientras que desde Los Ángeles es de alrededor de 5 horas.

    Si te gusta la aventura y tienes tiempo suficiente, puedes trasladarte en auto. El viaje desde Anchorage dura aproximadamente 8 horas por la autopista Richardson.

    Es importante que tengas en cuenta que las condiciones climáticas en Alaska pueden ser extremas, especialmente durante el invierno. Conduce con precaución y prepárate para posibles nevadas o hielo en la carretera.

    Si aún te quedaron algunas dudas respecto a este destino de ensueño, Fairbanks, puerta de entrada al corazón dorado de Alaska, consulta a nuestros especialistas de We Travel USA para que te asesoren en profundidad. 

    También, ponemos a tu disposición un canal de YouTube donde puedes mirar videos sobre este y otros destinos del estado ¡Clickea y suscríbete ya!

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